Caine Allen no era de los que se casaban. Pero después de rescatar a una mujer y llevarla a casa, el reverendo del pueblo le pidió un favor que debía hacer por honor.Desde el momento que se acostó con Desi, Caine supo que aquello iba a ser complicado. Desi tenía una voluntad de hierro y, aunque necesitaba su protección, tenía la firme determinación de no volver a dejar que ningún hombre la controlara. Entre ellos había un estrecho vínculo, pero a Caine eso no le bastaba. Quería todo lo que ella podía ofrecerle: sus sueños, sus gemidos, sus exigencias… todo. Pero seguía habiendo una recompensa por su cabeza y satisfacer a Desi sexualmente estaba resultando mucho más fácil que mantenerla con vida.

Sam MacGregor no sólo era conocido en todo Texas por imponer sus propias reglas y su sentido de la justicia, también por conseguir que las mujeres se rindieran incondicionalmente a él. Sin embargo, la seducción era lo último que se le había pasado por la cabeza cuando se encontró a una hermosa joven en apuros. Una mujer fuerte y orgullosa que guardaba secretos demasiado peligrosos como para enfrentarse a ellos sola.Isabella podía parecer inocente y sencilla, pero su fuerte carácter podía rivalizar con el de cualquier hombre. Su propósito inicial era entregarle su cuerpo a Sam sin arriesgar su corazón, pero algo le decía que aquél era un hombre íntegro y honrado que intentaba sobrevivir en una tierra hostil. Un hombre que, tras su coraza, anhelaba el contacto de una mujer apasionada y aventurera que estuviese dispuesta a arriesgarlo todo.

Para el despiadado ranger de Texas Tucker McCade, cuya sangre mestiza lo condenaba a la soledad y el rechazo, la fuerza y las armas eran el único medio de supervivencia en las tierras sin ley del salvaje Oeste. Era el polo opuesto de la mujer de la que se había enamorado, Sally Mae, una enfermera viuda, cuáquera y pacifista, que no podía entender cómo la misma mano que la hacía gemir de placer podía apretar el gatillo para arrebatar una vida. Tucker eratodo cuanto su cuerpo anhelaba, pero por otro lado representaba todo lo que su fe rechazaba.La pasión salvaje y las fantasías prohibidas empezaban a unirlos a pesar de sus diferencias. Pero los inquebrantables principios de Sally siempre estarían condenados a chocar con la irrenunciable naturaleza de Tucker.

Tracker Ochoa, ex proscrito de sangre mestiza y ranger de Texas, tenía que rescatar a Ari y llevarla sana y salva al rancho de los Ocho, aunque para ello tuviera que casarse con ella y escoltarla junto a su hijo pequeño a través del peligroso territorio de Texas. El matrimonio era una medida extrema que Tracker nunca se hubiera planteado, pero pronto descubrió las ventajas sexuales que reportaba.

El cuerpo y la mirada de Tracker excitaban a Ari tanto como la aterrorizaban sus cicatrices y sus demonios internos. Por desgracia, era su marido y la tenía a su merced. En aquella tierra hostil, plagada de mercenarios y bandidos, temía que jamás podría estar a salvo.

Tracker también albergaba sus temores. Por mucho que quisiera proteger a Ari y tenerla siempre consigo, sabía que el dinero, el poder y especialmente la verdad podían separarlos.

Shadow Ochoa estaba oculto en Kansas esperando a que sus compañeros de los rangers de Texas limpiasen su nombre. O eso estaba haciendo hasta que lo capturaron para llevarlo a la horca por un supuesto robo de caballos, y la preciosa Fei Yen intervino. Amparándose en una ley prácticamente en desuso, su exótica protectora aceptó casarse con Shadow y salió corriendo de allí llevándoselo consigo. La astuta e intrépida Fei estaba decidida a lograr su aspiración secreta: riqueza, seguridad y libertad. Que para ello tuviera que cargar con un marido era un inconveniente necesario para tener acceso al depósito de oro que de otro modo no podría conseguir. Pero pronto, Shadow comenzó a albergar sus propios sueños: la vida que los dos podrían tener si Fei quisiera ver más allá de sus deseos de independencia. El problema era que los cazarrecompensas lo estaban cercando…

Su pasado le ha perseguido durante toda la vida ... pero una mujer podría ser su salvaciónLos compadres del pistolero Caden Miller se están volviendo un tanto hogareños para su gusto. De modo que se marcha a Kansas para forjarse una vida y un lugar propio… solo, tal y como lo prefiere.

Maddie O'Hare se había sentido atraída por Caden desde que escapó al recinto de Hell’s Eight desde el burdel en que nació y se crió. Y no está dispuesta a dejarle marchar con tanta facilidad… hasta que es capturada por sus nuevos vecinos.

Cuado Caden descubre que Maddie está siendo retenida por un rival en un rancho cercano, su plan de rescatarla fracasa estrepitosamente y se ve convertido en el novio en una boda a punta de pistola. Tan sorprendida como Caden por el extraño giro de los acontecimientos, el beso de agradecimiento de Maddie posee una feroz promesa de lo más inesperada. Pero mientras unos viejos enemigos van tras él, Caden y Maddie se enfrentarán al peligro que pone a prueba su pasión… y que los unirá o separará para siempre.

Cuando juegas con el deseo, ¿estás preparado para jugarte el todo por el todo?

A diferencia de los restantes Hell's Eight, el hogar de Ace Parker no está en la pradera. Este vaquero inquieto anhela el ajetreo de Simple, Texas, una ciudad sin ley donde puede saciar sin culpa sus apetitos más oscuros. Al menos podía, hasta que llegó Petunia Wayfield. La espinosa maestra nueva está insistiendo en que Ace la ayude a librar a la ciudad de la ebriedad y del juego. Por esa clase de milagros, Ace exige una recompensa que la maestra solterona seguramente nunca le dará.

Pero Petunia no se está echando para atrás. No cuando la intensa pasión de Ace ofrece sacudirla hasta la médula. Tan pronto como ella pueda permitirse un boleto de regreso a su hogar en el Este, dejará atrás Simple para siempre. Hasta entonces ella igualará el sensual desafío masculino con el propio, desafiándolo a prescindir de su autocontrol ferozmente defendido. 

Entonces el verdadero peligro reclama a Petunia, obligando a Ace a revelar al hombre que en verdad es... aunque eso la ahuyente para siempre.

Es el último soltero entre los hombres de Hell's Eight, y no se conformará con nada menos que pasión...

Libre de cargas de esposa o familia, Luke Bellen es el miembro indiscutible de los Ocho del Infierno para liderar una travesía traicionera a través de territorio comanche. Pero Luke sospecha que nunca conocerá otro minuto de paz cuando la fotógrafa Josie Kinder se une a la fila de carretas. La ingeniosa Josie tiene una figura voluptuosa, una disposición alegre y una habilidad especial para meterse en peligrosos líos en busca de la fotografía perfecta. Luke piensa que Josie es demasiado joven, demasiado dulce para ser destruida por la vida dura y la tierra dura que él ama.

Pero la independiente Josie no dejará que ningún hombre, por más imponente que sea, decida qué es lo mejor para ella. Debajo de sus bromas juguetonas hay una poderosa corriente de lujuria pura pero no tan simple. Si Luke no fuera tan condenadamente correcto, vería que los años entre ellos no importan ni un ápice, ni cuando un solo toque puede prender fuego a los dos. Josie está empeñada en tenerlo todo, y eso incluye mantener a Luke en la foto... a menos que los bandidos vengativos que les siguen los pasos los encuentren primero.